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jueves, 28 marzo 2024

Un millón de papeletas como caídas del cielo

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Este domingo 24 de septiembre Barcelona amanecía para rendir la festividad en honor a su patrona. Una celebración en la que este año se ha dejado sentir el pulso cívico y político del referéndum del uno de octubre.

Desde primera hora de la mañana, la plaza de Sant Jaume se preparaba para el acto central del día de la Mercé con la jornada castellera y el desfile de los gegants y nans. Pero esta vez era distinto.

Como contaba a Diario Independiente Digital el ex alcalde de Barcelona, Xavier Trias, “necesitamos que en un momento como este, muchas personas declaren que no tenemos miedo y es un día especial porque coinciden la cantidad de movilizaciones con el día de las fiestas de la Mercè”.

Esta plaza a la que da la fachada del Ayuntamiento estaba jalonada de pancartas, colgadas en los edificios, a favor de la democracia y de la votación sobre la independencia fechada para el domingo próximo.

LOS CASTELLERS MÁS REIVINDICATOS

El ambiente festivo también lo era político. La mayoría de los pilares erigidos por los castellers fueron culminados con banderas o pancartas para defender el derecho a decidir y a favor de la celebración del referéndum.

Además, fue simbólico que algunos de los gegants portaban estaladas o paños con el lema democràcia que eran aplaudidos y coreados al grito de votarem por muchos de los congregados en Sant Jaume.

El presentador del acto central de la Mercé que empezó al filo de las once de la mañana también hizo referencia al momento que está viviendo Cataluña. Recordó que los catalanes “somos gente pacífica, democrática y cívica”.

Al son de la mítica canción popular “Baixant de la font del gat” que habla de la historia de una chica y un soldado, el maestro de ceremonias en la plaza de Sant Jaume dijo que en Catalañua “no necesitamos soldados, ni tanques, ni carros, ni policía en puerto”, en referencia a los cruceros atracados en el puerto de Barcelona donde se alojan las fuerzas de seguridad desplazados por el Gobierno español de cara al referéndum.

LAS PAPELETAS QUE CAYERON DEL CIELO

Una vez concluidas las principales actividades que tuvieron en Sant Jaume y con el ánimo de no interceder con los fastos de la patrona de la ciudad; un grupo de jóvenes situados en una azotea colindante con el Ayuntamiento desplegaron un gran estelada y dejaron caer miles de papeletas sobre las personas congregadas allí.

El gesto fue recibido positivamente por los asistentes que no dudaron en entonar el célebre “votarem”. No obstante, pasadas las 10 de mañana, varios voluntarios de entidades soberanistas repartían a pie de plaza papeletas entre la gente.

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