La portavoz adjunta de Unidos Podemos en el Congreso, Ione Belarra, ha denunciado este lunes el «hacinamiento» que sufren los menores internados en el Centro de ‘La Purísima’ de Melilla, en donde, según ha explicado, hay niños que «duermen en el suelo» o deben compartir colchón con otros internos.
Esto se debe, según ha indicado la diputada de Podemos a través de su cuenta de Twitter, a que, en la actualidad, hay 555 menores conviviendo en ‘La Purísima’, cuando la capacidad del centro le permite albergar hasta 175 niños.
Belarra ha visitado las instalaciones, a las que en un principio se le denegó la entrada. La dirigente morada explicó entonces a la prensa la situación, criticando «lo difícil» que le suele resultar realizar un «control de las políticas públicas en Melilla».
Así, ha apuntado que esta visita se solicitó con a través de correo y fax, así como llamadas telefónicas que no obtuvieron respuesta. Por este motivo, según ha explicado, ha tenido que acudir a la puerta de la Consejería en Melilla para pedir una reunión con los responsables de la materia.
Finalmente, y según ha señalado en Twitter la portavoz adjunta de Unidos Podemos, «sólo después de haber atendido a los medios» criticando estas dificultades, se le ha permitido entrar en ‘La Purísima». «Me ha llamado el consejero y me ha dejado entrar», ha escrito Belarra en la red social.
PIDE REVERTIR LOS RECORTES
En este sentido, ha indicado que ya habían denunciado anteriormente la «situación precaria» de estos menores en el centro de Melilla y ha lamentado que en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2018 propuestos por el Gobierno no se haya aumentado la aportación para esta materia, «a pesar de que el PIB ya está en niveles previos a la crisis». «No se recuperan los recortes en inversión que afectan a Melilla. Los derechos humanos y sociales se van a seguir vulnerando aquí», ha denunciado.
Belarra ha explicado, finalmente, que esta visita a la ciudad autónoma también tiene como objetivo visionar las imagenes captadas por la Guardia Civil en la madrugada entre el 31 de agosto y 1 de septiembre del año pasado, cuando un rescate de una patera acabó con la muerte de siete mujeres en el mar. El objetivo de la diputada es «esclarecer» lo ocurrido ante las diferentes versiones mantenidas por los supervivientes del suceso y el Ministerio del Interior.