Dice que la nueva recaudación debe llegar de «los que menos impuestos pagan».
El ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, ha afirmado este miércoles que «no es complicado» implantar este mismo año el nuevo impuesto a servicios digitales de grandes compañías tecnológicas, conocido como ‘tasa Google’, con el que el Gobierno prevé recaudar 600 millones en 2018, y ha augurado que se alcanzarán acuerdos «muy importantes» en materia de pensiones en el marco del Pacto de Toledo, en donde se consensuarán nuevos impuestos para que paguen «los que menos pagan actualmente».
Durante su participación en el encuentro informativo ‘El Ágora’, organizado por ‘El Economista’ y Ernst & Young (EY), Montoro ha destacado la experiencia de la Administración española en el ámbito digital, como se puso de manifiesto con la instauración del Suministro Inmediato de Información (SII) del IVA, y la capacidad de gestión de la Agencia Tributaria.
Montoro ha explicado que la propuesta inicial del Gobierno en el proyecto de Presupuestos era subir a casi siete millones de pensionistas su paga a través de la reducción del IRPF, si bien se ha completado con propuestas de otros grupos, como el «excelente» acuerdo con el PNV, que supondrá una subida para el resto de pensionistas del 1,6% en vez del 0,25% inicialmente previsto.
«Me parece muy positivo que (las propuestas) vengan de otros grupos, que se interesen por las grandes cuestiones nacionales y no solo territoriales», ha indicado Montoro, quien ha señalado que el Gobierno está revisando en el marco del Pacto de Toledo el índice de revalorización de las pensiones y algunos contenidos de la reforma que ha articulado en los últimos años.
En este sentido, Montoro ha indicado que el criterio del Ejecutivo es que las rentas públicas estén ligadas al crecimiento económico, la productividad y la estabilidad presupuestaria, en línea con los acuerdos suscritos con los sindicatos en materia de Función Pública y del Salario Mínimo, con la base de que «los pensionistas tienen derecho a percibir los beneficios del crecimiento». «Es lo que estamos debatiendo, creemos que vamos a llegar a acuerdos», ha presagiado Montoro, quien ha dicho que hay «todas las bases» para llegar a acuerdos «muy importantes» en materia de pensiones.
El Gobierno acordó con el PNV subir las pensiones en 2018 al 1,6% y en 2019 con el ritmo de la inflación, y retrasar cuatro años la entrada en vigor del factor de sostenibilidad, prevista para enero de 2019, hasta 2023. Los Presupuestos también contemplan un aumento de la base reguladora para calcular las pensiones de viudedad, que para este año alcanzaría el 56% y ya en 2019, el 60%, y un alza de las pensiones mínimas del 3%.
IMPUESTOS A LOS QUE MENOS CONTRIBUYEN
Para poder financiar estos incrementos, Montoro ha abogado por impuestos que sean «suficientes, equitativos y con el menor perjuicio económico», aunque al final «incomoda al que le toca pagar», si bien ha recalcado que la nueva recaudación hay que conseguirla en los sujetos pasivos que menos impuestos pagan.
De esta forma, ha confirmado que habrá nuevos impuestos en el ámbito europeo, que favorecen la competencia y se justifican que los operadores digitales de mayor tamaño, que pagan «muy pocos» impuestos en España y otros países, paguen más.
Por otro lado, ha apuntado que el Estado financiará los aumentos del gasto en pensiones hasta que se ponga fin al déficit de la Seguridad Social, que se prevé para el año 2021, por lo que hasta entonces aprobará nuevos impuestos con «acuerdo político» sobre los que menos contribuyen actualmente. «Esa va a ser nuestra base y eso es perfectamente factible, está identificado», ha apostillado.
IMPUESTOS VERDES E IRPF
El titular de Hacienda ha indicado también que otro tipo de tributos, como los impuestos verdes, hay que negociarlos en términos políticos, si bien ha aclarado que el Gobierno no va a actuar «nunca» con una política tributaria que impida el crecimiento y la creación de empleo.
En este sentido, ha recordado que el Gobierno acometió una bajada de impuestos en 2015 y 2016 de 12.300 millones en IRPF y Sociedades de una dimensión que «no se había hecho nunca», por lo que cuenta ya con «experiencia» para bajarlos de nuevo ahora e identificar las bases imponibles que sean lo menos perjudiciales para el crecimiento.
Preguntado sobre la posible rebaja del IRPF a final de legislatura, Montoro ha indicado que «se está haciendo» y que el Gobierno está «muy cómodo» bajando el IRPF, con lo que está «cumpliendo» lo prometido por el PP en las elecciones.
«El Gobierno siempre se ha presentado a todas las elecciones comprometiendo la bajada de impuestos, en 2017 para las rentas medias y bajas, y seguiremos proyectándonos en el resto de legislatura bajando ese impuesto que está en nuestro proyecto político», ha agregado.