6.8 C
Madrid
jueves, 28 marzo 2024
Array

Borrell dice a los diputados que la ayuda al desarrollo podría ser mayor si hubieran aceptado subir el techo de gasto

MÁS INFORMACIÓN

Opina que la sociedad no está tan movilizada como en los noventa y plantea la posibilidad de una nueva Ley de Cooperación y Desarrollo Sostenible.

El ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Josep Borrell, ha dicho este martes ante la Comisión de Cooperación al Desarrollo del Congreso que los fondos destinados a ayuda al desarrollo en 2019 podrían ser mayores de las que están sobre la mesa si la Cámara hubiera aceptado elevar el techo de gasto como había propuesto el Gobierno.

«No se puede mantener el techo de gasto a la baja y a la vez pedir que los sumandos crezcan, sus señorías resolverán», ha dicho. Borrell no ha facilitado ninguna cifra, aunque ha reconocido que lo previsto está lejos de sus expectativas y ha confiado en que «en los ajustes finales la cifra se puede mejorar algo porque el presidente del Gobierno tiene sensibilidad en esta materia».

Según ha dicho, varios de los diputados de la Comisión se han dirigido a él preocupados por la escasa dotación prevista. Y, aunque les ha agradecido su «movilización», les ha pedido que no den por buenas las cifras que han circulado, hasta que los presupuestos no estén aprobados. «Si es que se aprueban, y en eso ustedes tienen mucho que decir», ha añadido.

Borrell también ha apuntado que la sociedad española no está tan movilizada por la política de cooperación como hace 20 años, cuando él era secretario de Estado de Hacienda y había «gente acampada en la Castellana» pidiendo que la ayuda al desarrollo subiera al 0,7 por ciento del PIB.

Actualmente, según las estimaciones para 2017, está en el 0,2, lejos del 0,46 por ciento de 2009. El ministro no ha querido «ser maniqueo» y culpar a un solo Gobierno, consciente de que los recortes en cooperación comenzaron con la crisis y los recortes de 2010 -con José Luis Rodríguez Zapatero».

«No parece que la sociedad española tenga la misma pulsión de exigencia de una política que en aquellos tiempos estaba en el corazón de las reivindicaciones ciudadanas, hoy seguramente también lo está, pero no de forma tan masiva y generalizada, hay grupos muy comprometidos pero no veo gente acampada en la Castellana en los últimos años», ha dicho el ministro.

Sus palabras han indignado a la portavoz de Unidos Podemos, Noelia Vera, que ha reivindicado que la sociedad española es muy solidaria y ha pedido «voluntad política» para elevar la cooperación: «No culpe usted a la sociedad española».

Por otro lado, el ministro ha pedido a la Comisión que abra una reflexión sobre la posibilidad de aprobar una nueva Ley de Cooperación y Desarrollo Sostenible, aunque ha reconocido que es algo «ambicioso» para un Gobierno en minoría y que no todo se resuelve con leyes. Sin embargo, ha defendido que la ley actual tiene 20 años, «de cuando la gente acampaba en la Castellana», y no tiene en cuenta los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) ni la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible.

En todo caso, cree que esa reforma debería hacerse solo si es con consenso y, en esa línea, ha llamado a recuperar el pacto de Estado sobre cooperación que se forjó en 2007 y se rompió con la crisis, y para ello se ha comprometido a ampliar el nivel de transparencia. Tanto Unidos Podemos como Ciudadanos, por boca de Fernando Maura, se han mostrado en principios abierto a analizar la conveniencia de una nueva ley.

ENCUENTRO INTERNACIONAL SOBRE PATRIMONIO Y DESARROLLO

Por otro lado, ha anunciado que en noviembre se celebrará en Madrid un gran encuentro internacional sobre Patrimonio y Desarrollo, que espera que sea un éxito, para poner en valor cómo el patrimonio que tienen muchos países puede ser un vector de desarrollo.

Como prioridades inmediatas, ha avanzado que el Gobierno quiere presentar antes de fin de año una nueva Estrategia de Acción Humanitaria. Además, ha avanzado su intención de aumentar la contribución de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), después de haberla duplicado desde uno hasta dos millones de euros.

También quiere que España haga alguna contribución «mínimamente significativa» a la desaladora de Gaza, uno de los proyectos clave de los que se habló en la reciente reunión ministerial de la Unión por el Mediterráneo en Barcelona, porque hasta ahora no lo ha hecho por restricciones presupuestarias y no quiere que el apoyo a los palestinos sea «retórico».

Borrell ha hecho un reconocimiento al trabajo de los 2.600 cooperantes españoles y, como en otras ocasiones, ha asegurado que intentará mejorar sus condiciones de trabajo para que sean «homologables con las de otros países».

MÁS INFORMACIÓN

- Publicidad -
- Publicidad -

Última hora