La presidenta del PSOE, Cristina Narbona, ha exhortado a los demás partidos a superar las discrepancias políticas y buscar el consenso para resolver los problemas de los españoles, como defendió el Rey Felipe VI en su tradicional mensaje de Nochebuena.
«Animamos a todos los partidos políticos a que sean capaces de trabajar por un mayor consenso y en el diálogo desde el marco de la Constitución», ha declarado Narbona en la sede del PSOE, donde ha pedido a los líderes políticos que intenten «superar las discrepancias que existen» igual que se hizo durante la Transición a la democracia.
Al igual que hizo anoche el Gobierno, la dirigente socialista ha incidido en la «enorme trascendencia» que concedió Felipe VI al valor de la convivencia a partir del respeto, el diálogo y la «capacidad de superar posiciones muy diferentes».
«Queremos, como el Rey, animar desde el PSOE a todos los partidos políticos a trabajar desde ese espíritu de capacidad de diálogo, consenso y entendimiento, dentro de la ley y la Constitución», pero recordando que esta «no es algo inerte, sino algo vivo», ha recalcado, añadiendo que los problemas no se pueden solucionar desde «la confrontación, el rencor o el resentimiento».
Narbona ha destacado que el monarca señaló la importancia de lograr consensos para combatir la desigualdad social, atajar la falta de expectativas de los jóvenes o luchar contra la violencia de género, entre otras cuestiones. «El Rey nos pide que perfeccionemos nuestra democracia y que el progreso sea inclusivo», ha indicado.
FUERTE COMPONENTE SOCIAL
Además, ha aplaudido el «fuerte componente social» de la intervención del jefe de Estado, que se refirió a aquellas personas que atraviesan una difícil situación económica, social o personal, y también sus alusiones a los jóvenes, que «no conocieron la España anterior a la Constitución pero deben participar de sus logros».
La presidenta del PSOE ha afirmado que el Gobierno de Pedro Sánchez trabaja desde hace seis meses para atender algunas de las prioridades expuestas por el Rey, al incrementar el salario mínimo interprofesional a 900 euros, luchar contra situaciones de fraude laboral en las empresas, combatir la brecha salarial entre hombres y mujeres y actualizar las pensiones, todo ello con el fin de conseguir «una sociedad más justa».