El presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), el cardenal Ricardo Blázquez, se ha remitido a los tribunales sobre la exhumación de Francisco Franco, y ha pedido que el Valle de los Caídos, donde se encuentran enterrados sus restos, sea «un lugar de reconciliación».
«Ayer un juez dictó una decisión por dos cuestiones: no es ni un caso urgente y parece que decía que la preparación desde el punto de vista técnico era insuficiente», ha indicado Blázquez este miércoles 27 de febrero en la rueda de prensa final de la Comisión Permanente de la CEE.
Así se refería el arzobispo al auto dictado este martes por el juzgado de lo Contencioso Administrativo número 3 de Madrid por el que suspende cautelarmente el informe del Ayuntamiento de San Lorenzo de El Escorial que autorizaba a exhumar los restos del dictador, porque entiende que no siendo urgente adoptar esta medida, no se han elaborado los informes preceptivos necesarios para garantizar que la obra se realiza con seguridad para los operarios.
En cualquier caso, Blázquez ha insistido en que «la Iglesia nunca se ha opuesto a que sean exhumados» los restos del dictador pero ha subrayado que «tampoco lo ha apoyado» porque, según ha precisado, no son «parte en esta cuestión». Además, ha invitado a esperar a la decisión del Tribunal Supremo.
Asimismo, el cardenal ha recordado que él ha «celebrado» en la Abadía del Valle de los Caídos con la comunidad benedictina y ha apelado al significado de la cruz que «corona» la basílica. «Que sea un lugar de reconciliación de todos, la cruz es un símbolo de reconciliación», ha zanjado.