La Feria del Libro de Madrid ha presentado este jueves 21 de mayo el cartel de su próxima edición, aplazada por la pandemia de coronavirus del 2 al 18 de octubre, y que supone una reivindicación de la mujer lectora «en tiempos excepcionales y de dolorosas circunstancias».
«Históricamente, la presentación del cartel de la Feria del Libro de Madrid suponía de hecho el comienzo de la misma. Pero vivimos tiempos excepcionales, las nuevas, dolorosas y adversas circunstancias que estamos viendo nos llevan a presentar públicamente el cartel de forma virtual, de una Feria que, si nada lo impide, celebraremos en octubre», ha señalado el director del evento, Manuel Gil.
La autora del cartel ha sido la ilustradora Nuria Riaza, quien ha apelado «a la lectura y la escritura como símbolos de futuro y empoderamiento» con una reivindicación en favor de «tantas mujeres, de antes y ahora, sin una habitación propia».
La imagen es un dibujo, que se adaptará a diferentes soportes, realizado con bolígrafo azul y bordados en hilo de algodón, de una mujer sujetando un libro, con el rostro cortado.
Según ha remarcado Gil, el cartel rinde homenaje «a las autoras que, a lo largo de la historia de la literatura, han tenido que escribir bajo la condición de anónimo, debiendo ocultar su nombre, y crear bajo seudónimo». «Es, por extensión, también un homenaje a las mujeres lectoras, hoy mayoritarias en su acercamiento al libro, la literatura, y la lectura», ha añadido.
Riaza ha desarrollado el proyecto teniendo presentes, además de la artesanía de sus propias abuelas, a personalidades como Mary Ann Evans, las hermanas Brontë, Louisa May Alcott, Violet Paget, Karen Blixen, Sidonie-Gabrielle Colette, Cecilia Böhl de Faber, Caterina Albert, Amantine Dupin o J. K. Rowling.
Inspirada en el retrato clásico, en el Renacimiento y el Barroco, ha confesado «una voluntad transgresora» al dejar incompleto el rostro de la protagonista y en el hecho mismo de dibujarla con un libro entre las manos «en una época en la que las damas eran retratadas sosteniendo cualquier otro objeto como joyas, abanicos, flores o espejos, y la escritura era un lujo que solo el hombre se podía permitir».
Desde mediados del pasado mes de abril, la Feria del Libro de Madrid está trabajando en un protocolo para su edición de octubre denominado ‘Feria segura’ que incluirá la instalación de arcos de medición de temperatura y la desinfección diaria de casetas y pabellones, entre otras medidas para combatir la pandemia de coronavirus y conseguir autorización para celebrar el evento.
Así lo hizo saber la organización en un documento al que tuvo acceso Europa Press en el que también habla de control de acceso, limitación de aforo y «medidas extremas de distanciamiento social». En el caso de la desinfección de casetas y pabellones, remarca que se produciría dos veces cada día.
Tal y como detallan los organizadores, este tipo de protocolos de seguridad posiblemente llevarán a un rediseño de los espacios de la feria. Además, apuntan a que este planteamiento está siendo discutido «con la mayor urgencia» con las empresas de infraestructuras y tecnologías para poder presentar un documento a los poderes públicos.
La premisa con la que trabajan los organizadores es la de alcanzar «una seguridad extrema» para todos los participantes, si bien añaden que existe «el riesgo obvio» de la cancelación definitiva de «todo tipo de espectáculos masivos de público».