Cree que el parque hotelero de Barcelona «admite perfectamente un pequeño tiempo de reflexión».
El presidente de Fira de Barcelona, Josep Lluís Bonet, ha afirmado que en 2016 dejará el cargo en la institución ferial con «satisfacción» tras agotar el máximo de tres mandatos que permiten los estatutos.
En una entrevista de Europa Press, ha expuesto: «Me retiraré con la satisfacción de que he contribuido a que esto vaya bien; al final es el servicio al país que es el servicio a la gente».
Ha señalado que en Fira participan 2.000 empresarios «sin cobrar un duro», y que la institución está en récord histórico de ingresos, con 152,6 millones de euros en 2014, una 30% más respecto a 2013 y un 32% más respecto a 2012.
Ha considerado que Fira de Barcelona ha acertado con su enfoque estratégico, y ha añadido: «Se ha dado un resultado para el país extraordinario, y hemos construido, no destruido; creo que va por el buen camino, buenísimo para Barcelona, Cataluña y el conjunto de España».
NUEVO AYUNTAMIENTO
Respecto a la relación de Fira de Barcelona con el Ayuntamiento liderado por Ada Colau, ha reconocido que no comparte el ideario de la alcaldesa, pero que, como presidente de Fira, han tenido hasta ahora una relación «perfectamente correcta».
Colau ya ha actuado como presidenta del consejo general de Fira, y Bonet ha celebrado que «se alineó en el momento decisivo» con la candidatura de ampliar la capitalidad mundial del móvil hasta 2023.
Respecto a la moratoria hotelera planteada por el consistorio, ha considerado que «Barcelona tiene una buena situación de la planta hotelera que admite perfectamente un pequeño tiempo de reflexión».
En todo caso, ha considerado que debe evitar «parar más de la cuenta» los proyectos y actuar con flexibilidad en los casos en que sea necesario.