El Ministerio de Cultura ha defendido la inclusión de las producciones creadas por mujeres dentro del grupo «obras difíciles», que reciben ayudas del Ejecutivo, y rechaza las críticas de Vox que, además, considera este término «vejatorio».
«No se considera vejatorio este término, sino que constata la desigualdad real existente en el ámbito de la cultura, motivo por el cual se realizan acciones positivas para tratar de contrarrestarlas», apunta el Ejecutivo en respuesta a una pregunta parlamentaria realizada por la diputada de Vox Carla Toscano.
La cuestión registrada por el partido que preside Santiago Abascal pide explicaciones al Gobierno por el uso del término «obra difícil» para las producciones creadas por mujeres y se pregunta si esta denominación no es «vejatoria».
Se refieren a la comparecencia del Ministro de Cultura y Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes, el pasado mes de febrero en el Congreso, en donde anunció que la nueva Ley del Cine prevé que las obras audivisuales dirigidas por mujeres sean consideradas como «obras difíciles», es decir, que se incluyan en un grupo así denominado en el que también están los cortometrajes, las producciones extranjeras o aquellas que se ruedan en las lenguas cooficiales españolas, y opten, así a un aumento de las ayudas de hasta un 75%.
ACCIONES POSITIVAS PARA LA IGUALDAD
En la respuesta del Gobierno, recogida por Europa Press, recuerda a Vox que el mandato de la Ley de Igualdad es que «los poderes públicos promuevan las condiciones para que la libertad y la igualdad del individuo y de los grupos en que se integra sean reales y efectivas»; que «remuevan los obstáculos que impidan o dificulten su plenitud» y «faciliten la participación de todos los ciudadanos en la vida política, económica, cultural y social», para lograr dicha igualdad real y efectiva.
«Las acciones positivas parten del hecho de que en la sociedad no todas las personas tienen las mismas oportunidades ni el mismo trato para llegar a los objetivos y metas que se proponen. No obstante, buscar la igualdad no implica dar lo mismo a todo el mundo, sino ver dónde están las desigualdades y por qué se producen y tratar de llevar a cabo acciones dirigidas a corregir o contrarrestarlas», explica el Ejecutivo en su respuesta.
A su juicio, la inclusión de los largometrajes dirigidos por mujeres en la categoría de «obras difíciles» da respuesta a uno de los artículos de la Ley del Cine, que señala que el Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA), «establecerá medidas de fomento de igualdad de género en el ámbito de la creación cinematográfica y audiovisual».
Del mismo modo, responde al Plan de Igualdad de género 50/50, compartido por los países miembros de la Asociación de Agencias de Cine Europeas (EFADs) y cumple con la Comunicación de la Comisión Europea sobre la ayuda estatal a primeras obras cinematográficas y otras producciones del sector audiovisual, según explica.