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viernes, 26 abril 2024
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Geriatras piden un intervalo mínimo entre tests y aumentar el personal de residencias frente a la segunda ola de Covid

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La Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG) ha trasladado a la vicepresidencia de Derechos Sociales sus diez principales recomendaciones para afrontar la segunda ola de Covid19 en las residencias, como indicar las reservas de equipos de protección individual (EPI), establecer un intervalo mínimo de tiempo para hacer test diagnósticos o hacer públicos los planes de contingencia. Según explica la sociedad, debería ser «responsabilidad de los servicios de salud pública de cada comunidad autónoma» el establecer un intervalo mínimo de tiempo entre tests (tanto para residentes como para profesionales), así como el tipo de prueba a realizar (antígenos o PCR).

Además, proponen que se redacte un documento en este sentido en el que, al menos, recoja que se deben seguir en este sentido las indicaciones ofrecidas por estos servicios.

También considera necesario que se indiquen las reservas estratégicas mínimas de equipos de protección individual que debería tener cada residencia. Según la SEGG, esta reserva debería ser «el equivalente al consumo de 3 meses, tomando como referencia el consumo medio del mes de mayor incidencia de la primera oleada epidémica».

REFUERZO DE LAS TERAPIAS

Del mismo modo, propone que «se hagan públicos los planes de contingencia de cada residencia» para todos sus usuarios y sus familiares, y que estos documentos recojan «de forma clara los planes que se pondrán en marcha durante los periodos de confinamiento de los residentes para paliar los efectos del aislamiento».

Geriatras y gerontólogos propone que, especialmente se detalle «cómo se reforzará la terapia física, ocupacional y recreacional» de los mayores «para evitar los efectos secundarios del confinamiento».

Entre sus sugerencias, la SEGG llama a un incremento del número de recursos humanos (especialmente de gerocultores y de enfermeras) durante los periodos en los que haya afectación por el coronavirus y que se forme de manera obligatoria a estos profesionales, y a los ya contratados, en la correcta utilización de EPI.

SOBRE EL INFORME DE LA SECRETARÍA DE ESTADO

Además, proponen que se categoricen y se hagan públicos los tipos de centro en cada territorio, que las residencias que no puedan aislar a personas con la infección tengan claramente establecidos los centros de derivación y los circuitos asistenciales; que en los informes se incluyan también las derivaciones que se han producido al hospital y los contactos que se han tenido con las familias; y que cuando una residencia llegue a una situación crítica, que el soporte personal se preste desde el hospital y los servicios de atención primaria del área correspondiente.

Tal y como ha indicado la SEGG, se tratan de sugerencias referidas al Documento ‘Informe del Grupo de Trabajo Covid19 y Residencias’, de la Secretaría de Estado de Derechos Sociales, una iniciativa que la sociedad ha «agradecido».

A su juicio, este informe será «de gran ayuda para afrontar la segunda ola y sucesivas en las residencias de mayores» del país y, en este sentido, han ofrecido su «apoyo en la elaboración de otros protocolos que tengan previstos, o en cualquier iniciativa en la que puedan pensar que les pueda ser de apoyo la SEGG».

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