La Plataforma de Infancia ha enviado una carta al vicepresidente de Derechos Sociales, Pablo Iglesias; a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso; y al alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, para pedirles que garanticen el suministro eléctrico en la Cañada Real Galiana, en Madrid.
Según precisa la Plataforma, más de 1.800 niños que viven en los sectores 5 y 6 de la Cañada Real se ven afectados por los cortes de suministro. Además, en las últimas semanas se han producido intoxicaciones ante la necesidad de utilizar formas alternativas para calentarse y se han dado síntomas de congelación en bebés, según la información proporcionada por asociaciones de vecinos de las zonas afectadas.
En la misiva, el presidente de la Plataforma de Infancia, Carles López Picó, denuncia la situación que vienen sufriendo desde octubre de 2020 los niños y niñas de la Cañada Real Galiana por el corte del suministro eléctrico y recuerda que se deben respetar sus derechos fundamentales.
«Las organizaciones de infancia somos muy conscientes de la importancia de los primeros años de vida de los niños y niñas, cruciales para su desarrollo, bienestar y salud el resto de su vida», subraya López Picó en la carta.
En concreto, advierte de que se ven afectados derechos fundamentales, como son «el interés superior del niño, el derecho al desarrollo y la supervivencia, el derecho a la salud, a disfrutar de un nivel de vida adecuado, el derecho a la educación o el derecho al juego».
La Plataforma de Infancia precisa que el acceso al suministro eléctrico es «un elemento esencial» para una vivienda digna, y un «requisito previo» para una buena salud, según la Organización Mundial de la Salud.
Asimismo, recuerda un estudio del Defensor del Pueblo de 2017 sobre la protección a los consumidores vulnerables en materia de energía eléctrica, e indica que, a comienzos de 2020, el entonces Relator Especial de Naciones Unidas sobre la extrema pobreza y los derechos humanos Philip Alston ya alertaba en un informe tras su visita a España, de su preocupación por la situación de la Cañada Real.
Durante estos últimos meses, la Plataforma de Infancia asegura que esta situación se ha hecho «insostenible, agravada por las bajas temperaturas».