El guionista Daniel Remón da el salto a la novela con ‘Literatura’ (Seix Barral), una suerte de historia a caballo entre ‘La princesa prometida’ y ‘Peter Pan’ en la que el autor recurre a la imaginación para contar a un niño un relato inventando y a veces autobiográfico.
«No creo que estemos en una sociedad más complicada para crear ficción. Pero ahora sí que puede haber una cierta autocensura o un miedo por parte del escritor antes de empezar a escribir. Pero yo no veo negativo el hacerse preguntas previas: no estoy de acuerdo en que antes había más libertad en la creación», ha defendido en una entrevista con Europa Press el autor.
De hecho, ha recordado cómo además en periodos con cierta falta de libertad «paradójicamente» suponían la creación de grandes obras. «Berlanga o Azcona fueron capaces de decir cosas que no se podían verbalizar», ha puesto como ejemplo.
Remón se ha referido de esta manera a un tema –el de la libertad de creación– que está en el foco, más aún tras la polémica decisión de Disney de eliminar escenas de algunas de sus obras más reconocidas. «Es un tema delicado, pero se censuran cosas del pasado y hay que ver el contexto en que estaban dirigidas esas películas», ha defendido
«Me parece bien que se haga una relectura critica y, sobre todo, cuando se está hablando de cuentos infantiles que en los originales tenían barbaridades –aunque luego en Disney llegaban a edulcorar–. Sí creo que estos cuentos se deben releer desde otra posición y ser conscientes del momento en que se escribieron», ha indicado.
En ‘Literatura’, este guionista de películas como ‘Casual day’ coge una coctelera de ingredientes literarios para escribir una novela con cocodrilos, brujas malas y buenas, maletines y, como conexión a la realidad, con coronavirus. El propio Remón reconoce que la idea de este relato surgió de la petición de su sobrino de contar un cuento en pleno confinamiento.
El cocodrilo sirve de metáfora de un «monstruo» que tiene algo de esta pandemia. «Es algo invisible que no sabemos parar y, desde el principio de los tiempos, siempre que ha pasado algo así se ha achacado a los dioses: nos da mucho miedo sentir que no podemos hacer nada», ha explicado.
Así, el escritor madrileño no cree que se pueda extraer un aprendizaje de este periodo. «Se están haciendo muchas lecturas del covid, pero porque estamos en una sociedad que busca siempre lo positivo de manera patológica con frases como la de ‘saldremos más fuertes’. Quizás no haya nada que aprender, esto es una pandemia y lo que toca es sobrevivir», ha destacado.
Y, dentro de esa supervivencia, también ha hecho alusión a la actual situación de las salas de cine, un sector de los más castigados económicamente este último año. «Evidentemente, vamos a seguir consumiendo ficción y cada vez más, aunque es posible que esa nueva forma de consuma sea solos en casa frente a una pantalla», ha lamentado.
«Me preocupa que se pierda ese ritual de cines y teatros y claro que preocupa el futuro de las salas: cada vez hay más televisión y menos cine», ha indicado Remón, quien reconoce «no haber sido nunca tan feliz» como durante el proceso de escritura de este libro.
«Es un espacio extremo de libertad que no he podido encontrar en cine. A veces uno tiene esa sensación de que la literatura puede ser algo inútil, pero luego cuando me pongo a pensar, me doy cuenta que escribir sirve para conocer el mundo en el que vivo. Cuando la realidad golpea tan fuerte como ahora, el mundo necesita ficciones y eso no va a cambiar», ha concluido.