El papel de los laicos y la gestión financiera, al centro de las discusiones.
El arzobispo de Viena, el cardenal Christoph Schönborn, ha destacado que el Papa está «plenamente comprometido» con el pontificado y con la reforma de la Curia a la salida de la tercera y última reunión que han mantenido cerca de 200 purpurados en el Vaticano con el pontífice.
«El Papa está plenamente comprometido; aunque las piernas no le funcionen, el corazón y el alma funcionan muy bien», ha asegurado Schönborn en declaraciones al diario italiano ‘La Repubblica’, atajando así los rumores de renuncia que han sobrevolado la cumbre en el Vaticano.
Francisco ha reunido durante dos días a 197 cardenales en reuniones a puerta cerrada y, por tanto, sin periodistas en el Aula del Sínodo del Vaticano para reflexionar sobre la constitución apostólica «Predicad el Evangelio» que entró en vigor el pasado 5 de junio.
Según ha informado Vatican News, los temas que han prevalecido en las discusiones de este martes han sido la importancia de la formación del personal, la espiritualidad de la Curia, y, sobre todo, la cuestión de los laicos y el papel que pueden desempeñar tanto en los vértices de algunos Dicasterios del Vaticano como en los cargos de algunas diócesis.
Precisamente el objetivo de la reunión es ayudar a los cardenales a entender el espíritu de la nueva constitución apostólica Praedicate Evangelium. Una de las novedades que impone la nueva carta magna que rige el funcionamiento del Vaticano es que los jefes de dicasterio –ni siquiera los de las antiguas congregaciones– ya no tienen que ser necesariamente cardenales, pueden ser también laicos.
En las reuniones de cardenales también se ha afrontado el tema de la reforma en las finanzas del Vaticano que pasa por ejemplo por el funcionamiento del Consejo para la Economía, que tiene la tarea de supervisar la gestión económica y vigilar las estructuras y actividades administrativas y financieras de los Dicasterios de la Curia Romana. O por la centralización de las compras y la gestión financiera del patrimonio a través del Instituto para las Obras de Religión (IOR), llamado banco del Vaticano.
En todo caso, el cardenal Schönborn ha considerado que en la reforma de la curia «la gestión del cambio es algo lento» que no se logra de un día para otro.
Francisco había convocado al Vaticano a los 226 purpurados que componen el colegio cardenalicio, aunque al final solo se han presentado 197. Del total esos, solo 132 son electores y provienen de 69 países. Muchos, como el cardenal Leopoldo Brenes, de Nicaragua, no han podido asistir, en su caso por la crisis política que atraviesa su país.