10 C
Madrid
jueves, 28 marzo 2024
Array

Uriarte dice que «la tarea de pacificar, reconciliar y defender los derechos humanos y colectivos» han guiado su labor

MÁS INFORMACIÓN

El obispo emérito de San Sebastián, Juan María Uriarte, ha subrayado este domingo que «la tarea de pacificar, reconciliar y defender los derechos humanos y colectivos» han guiado su labor y ha destacado que su «única pasión» siempre ha sido «promover la fe y contribuir a la paz».

Uriarte ha sido uno de los seis galardonados por la Fundación Sabino Arana que este domingo ha entregado sus galardones en un acto desarrollado en el teatro Arriaga de Bilbao. Junto al obispo emérito también se ha reconocido la labor del empresario Juan Eduardo Arrázuriz, Cafés Baqué, la Fundación Catedral Santa María de Vitoria, la Federación de Bancos de Alimentos de Euskadi, y Zumaiako Emakume Arraunlariak.

En la cita han estado presentes el lehendakari, Iñigo Urkullu, junto a consejeros del Ejecutivo, la presidenta del Parlamento vasco, Bakartxo Tejería, el diputado general de Vizcaya, José Luis Bilbao, y el alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, entre otros.

En su intervención, Uriarte ha reconocido que «promover la fe y contribuir a la paz» han sido su doble y «única pasión» y ha remarcado que «el amor a mi pueblo, la empatía profunda con todas las victimas y la entrega total a la comunidad cristiana» le han motivado en toda ocasión. No obstante, ha reconocido su trabajo por esta causa «no ha estado exento de lagunas y desaciertos», a pesar de su buena voluntad.

«Una convicción me ha guiado en el cumplimiento de este servicio, la tarea de pacificar, reconciliar, defender los derechos humanos y colectivos pertenece a la misión de la comunidad cristiana y sus pastores. Así lo atestiguan la palabra de Dios, el pensamiento social cristiano y la reflexión sostenida de los obispos de este país», ha añadido.

En este contexto, ha considerado que algunos han podido interpretar «ciertas afirmaciones episcopales» como elementos «contaminantes de la pureza de la doctrina espiritual del Evangelio», aunque ha indicado que de tal interpretación «subyace una comprensión mermada de la salvación cristiana que, en palabras de Pablo VI, es liberación de todo lo que oprime al hombre, particularmente del pecado».

«La liberación humana, la reconciliación de las personas y los grupos, la paz entre los pueblos son signos, inicio y parte de la salvación total ofrecida por Jesús que los cristianos hemos de testificar y promover en obras y palabras», ha expresado.

Asimismo, ha advertido de que en la realización del ministerio la palabra es «esencial para los pastores». «Es ante todo un anuncio que estimula la esperanza de reconciliación tan probada entre nosotros por la lentitud y las dificultades del camino. Creo que en estas circunstancias levantar la esperanza de caída y sosegar la esperanza impaciente es una misión pastoral necesaria y saludable», ha añadido.

También ha reconocido que la palabra es «denuncia mansa e intrépida, que, con amor y dolor, desvela los obstáculos que ignoran los derechos de todos y retardan la reconciliación». «Esta palabra desveladora crea escozor en algunos y sufrimiento en quien la pronuncia. Es el precio que hay que pagar con magnanimidad, paciencia y sin dramatismos. Este precio es siempre poca cosa si contribuye a la reconciliación», ha finalizado.

RESTO DE PREMIOS

Junto al obispo emérito de San Sebastián, la Fundación Sabino Arana ha reconocido también la labor del empresario Juan Eduardo Arrázuriz, Cafés Baqué, la Fundación Catedral Santa María de Vitoria, la Federación de Bancos de Alimentos de Euskadi y Zumaiako Emakume Arraunlariak.

En su intervención de agradecimiento, la presidenta del Consejo de Cafés Baque, María Baqué, muy emocionada, ha reconocido que es «ilusionante y emocionante» que «la gente de casa se acuerde de nosotros».

«Seguir apostando por este proyecto lo hacen 116 familias que trabajan con nosotras y que han aceptado cambios importante estos años», ha indicado, para añadir que «el premio es una palmada en la espalda para seguir adelante».

Asimismo, ha manifestado que deben ser capaces de «seguir adelante» y «apostar por el patrocinio y tocar el corazón de muchas empresas».

Por su parte, Juan Ignacio Lasagabaster, director de la Fundación Catedral Santa María de Vitoria, ha recogido el premio otorgado por la Fundación Sabino Arana y que ha calificado de «muy especial».

«Lo recibimos con modestia, pero también con orgullo, porque viene a confirmar que, en buena parte, los objetivos que perseguíamos se están cumpliendo», ha expresado.

En este contexto, ha recordado que los alaveses se empeñaron en que la catedral de Santa María saliera «del difícil trance» en que se encontraba y «recuperase su presencia emocional». «Está a punto de volver a ser operativa como tal y se ha significado como un referente de cómo sabemos hacer las cosas por aquí, convertir un problema en una oportunidad», ha añadido.

Entre los galardonados este domingo también ha estado el empresario vasco-chileno Juan Eduardo Arrázuriz Ossa, quien ha manifestado estar «muy honrado» por un reconocimiento que le vincula «a mi familia de origen».

Tras referenciar a los escritores Pablo Neruda y Miguel de Unamuno, Arrázuriz ha destacado que «no es posible analizar la historia de Chile desde el siglo XVIII sin encontrar actividad de los vascos en el engrandecimiento del país».

Por su parte, en nombre de la Federación de Bancos de Alimentos de Euskadi, su presidente Daniel Fernández, ha destacado que el galardón supone una «gran consideración y un estímulo para seguir trabajando por los más desfavorecidos».

«Ha aumentado la cifra de personas que necesitan alimentos. Alrededor de 80.000 personas al año reciben ayuda alimenticia de los bancos», han destacado, para añadir que cuentan con alrededor de 500 donantes y otros tantos asociaciones benéficas».

Asimismo, ha advertido de que las estimaciones que manejan les hacen prever un incremento de familias que necesitarán su ayuda y ha hecho un llamamiento a «todos aquellos que se encuentran en el umbral de la pobreza para que acudan a recibir nuestra ayuda y apoyo».

Por último, la Fundación Sabino Arana ha galardonado también a Zumaiako Emakume Arraunlariak-Telmo Deun Arraun Elkartea, cuyo presidente, Luis María Osa, ha agradecido el premio y ha mostrado su confianza en «estar el nivel del mismo».

En su intervención, ha recordado a «todas las niñas y mujeres» que han remado en el club y especialmente a las «pioneras que abrieron la brecha para que se consiguieran posteriores éxitos». «Deseamos que, con premios como este, el deporte femenino logre el sitio que se merece», ha añadido.

MÁS INFORMACIÓN

- Publicidad -
- Publicidad -

Última hora