El expresidente de la Diputación se ofrece a responder a jueza y fiscal cuando se resuelva sobre la anulación y reitera su inocencia.
El expresidente de la Diputación de Pontevedra y presidente del PP en esta provincia, Rafael Louzán, citado para este miércoles en calidad de investigado en el marco de la Operación Patos, se ha acogido a su derecho a no declarar y ha avanzado su disposición a responder a las preguntas de la jueza y el fiscal «sin problemas», pero cuando se resuelva la petición de varios letrados de anular las escuchas telefónicas al constructor Enrique Alonso Pais.
A su salida del juzgado de Vigo, Louzán ha confirmado que no ha prestado declaración y ha afirmado que pidió «posponer» su comparecencia hasta que la titular del juzgado de instrucción número 7 resuelva, previsiblemente la próxima semana, sobre la petición de varios letrados (entre ellos, las defensas de Alonso Pais y su socio, las de Ángel Rivas y David Regades, el funcionario Álvaro C., y varios más) de que se anulen las escuchas telefónicas porque no consta en la causa el auto que autoriza ese ‘pinchazo’ (aunque sí hay copia electrónica).
El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) ha precisado que Louzán «no pidió aplazamiento alguno» a la jueza, sino que se acogió a su derecho a no declarar, «sin perjuicio de que pueda pedir al juzgado ser citado de nuevo, como cualquier investigado».
El expresidente de la Diputación ha precisado que él no se ha adherido a la petición de nulidad de las escuchas, puesto que no tiene «nada que ocultar» y en la causa figura solo una conversación con un responsable de Eiriña que es, según ha subrayado, «totalmente intrascendente».
OBRAS
En todo caso, ha insistido en su inocencia y, al igual que otros cargos públicos investigados en la causa, ha descargado toda la responsabilidad de la tramitación de las obras investigadas en los técnicos. «Hay un extraordinario equipo de funcionarios que son los que tramitan, yo era una persona más de esa administración, y en la documentación todo obra, creo, correctamente», ha apuntado.
Rafael Louzán ha afirmado, asimismo, que no adoptó ninguna decisión para beneficiar a la constructora Eiriña, y ha recordado que no estaba presente en la mesa de contratación de la Diputación. «Hay unos técnicos muy competentes que toman las decisiones, es indudable que ninguna de mis decisiones pudieron beneficiar a esa ni a otra empresa», ha proclamado.
Por otra parte, también ha precisado que no recibió regalos de Eiriña e insistió en que es «indudable» que no tomó ninguna decisión para beneficiar a ésta u otras empresas. Asimismo, ha insistido en que está «muy tranquilo» y ha rechazado que esta investigación pueda ser un «lunar» en su trayectoria política porque ha dado «la cara».