El ministro de Defensa, Pedro Morenés, ha mostrado este miércoles su apoyo a la presencia del Ejército en Catalunya, ha agradecido a «la mayoría» de catalanes su acogida a los militares y ha asegurado que los que no quieren su presencia son minoritarios.
«Comprendo que la presencia militar a veces genera algunos sentimientos encontrados, que no comparto», ha declarado a los periodistas al visitar el cuartel barcelonés de El Bruch con el inspector general del Ejército, Ricardo Álvarez-Espejo, y el jefe del acuartelamiento, Alfredo Fernández Suárez.
Ha explicado que el cuartel de El Bruch «tiene una utilidad operativa muy evidente» y ha agradecido a los soldados el alto espíritu de servicio del que dispone.
CAMBIO EN EL EJÉRCITO DE TIERRA
Morenés ha añadido que el Ejército es un ejemplo de valores y patriotismo para la sociedad, y que «si alguien defiende la paz y tiene valores de entrega, sacrificio y solidaridad son los militares que dan la vida por el mundo».
Ha explicado que el Ejército de Tierra está en plena transformación: el Regimiento de Cazadores de Montaña se convertirá en un Regimiento de Infantería, lo que supone la incorporación de «determinadas capacidades operativas», tanto a nivel estratégico y táctico como a nivel de material.
GRÀCIA Y EL ESTADO DE DERECHO
Sobre la actuación de los Mossos d’Esquadra en los disturbios del barrio barcelonés de Gràcia, el ministro ha dicho que la valoración debía hacerla «quienes están en esas obligaciones» y ha recordado la importancia de garantizar el Estado de Derecho.
Al preguntársele por que los niños pudieran sostener armas de fuego en la apertura del castillo de Sant Ferran de Figueres (Girona) por el Día de las Fuerzas Armadas, ha respondido: «Nuestros niños deben saber que la libertad y la democracia tienen un precio y a veces es la vida».