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viernes, 19 abril 2024
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Picardo arremete contra el «nacionalismo rancio» de Margallo y pide aparcar el debate de soberanía

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El primer ministro de Gibraltar, Fabián Picardo, ha lamentado el «nacionalismo rancio» del ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación en funciones, José Manuel García Margallo, al que ha asegurado que si no se habla de soberanía de Gibraltar, las relaciones con España serían «mucho mejor» a pesar del Brexit, tras lo que ha rechazado enfrentamientos por «colocar un pedazo de seda rojo y amarillo» arriba del Peñón.

Ha rechazado asimismo la propuesta de cosoberanía sobre Gibraltar, aludiendo al referéndum de 2002, y ha dejado claro que «si hace falta nos volveremos a pronunciar sobre la soberanía, pues no habría duda de que saldrían los resultados más claros de que los del Brexit».

Tras reunirse con los secretarios generales de UGT-A y CCOO-A, Carmen Castilla y Francisco Carbonero, respectivamente, Picardo, quien se pronuncia contrario a la salida de Reino Unido de la UE, considera que España y Gibraltar «tienen con el Brexit una oportunidad», toda vez que «estamos condenados a entendernos, pero desde el diálogo y respeto a las líneas rojas de cada uno». «Ni queremos azotes ni cariño, solo pedimos respeto y sabiendo que hay precios que no vamos a pagar», ha aseverado Picardo.

Picardo ha recordado la importancia de Gibraltar, donde trabajan 12.000 personas de fuera del Peñón –7.000 de ellos andaluces–, toda vez que «es el segundo empleador de Andalucía tras la Junta» y supone «el 25 por ciento del PIB del Campo de Gibraltar», por lo que se ha mostrado optimista e insiste en que «si se deja a un lado hablar sobre soberanía, las relaciones pueden ser magnificas, o aún mejor». «No es procedente que en el siglo XXI todo tenga que pasar por un pedazo de seda rojo y amarillo que condicione todo esto», se lamenta.

Asimismo, ha apuntado que debía esta reunión, tras la visita de Carbonero y Castilla, que estuvieron en Gibraltar, ha rechazado el argumento «xenófobo» del peligro de la inmigración que esgrimen los partidarios del Brexit, toda vez que en Gibraltar «el punto de vista es totalmente diferente» ya que en la Roca «trabajan 23.000 personas, de los que 12.000 vienen todos los días como ‘inmigrantes’ a trabajar en la Roca y no los consideramos como tales, sino amigos y parte esencial de la prosperidad de Gibraltar».

Picardo, que recuerda que el 96 por ciento de gibraltareños votó en contra del Brexit en el referéndum del 23 de junio, ha aclarado, frente a lo que apunta Margallo, que «el hecho de que May apriete el gatillo del artículo 50 de Tratado de Lisboa antes del 31 de marzo de 2017 no significa que Reino Unido esté ya fuera de la UE, sino que significan que empezará la negociación para salir, pero Gibraltar seguirá pagando el canon a la UE y seguirán teniendo derechos como ciudadanos comunitarios».

Para el primer ministro de Gibraltar el momento en que Reino Unido no esté en la UE, «es momento de diferentes oportunidades», de manera que «mientras algunos postulan que es una gran oportunidad para usurpar la nacionalidad de Gibraltar, en su nacionalismo rancio, pero también puede apostarse por seguir con la prosperidad en la zona, y los 7.000 empleados andaluces que trabajan allí pueden aumentar».

Ha contrapuesto las cifras de desempleo «escalofriantes» de la zona del Campo de Gibraltar, con ciudades con un 40 por ciento de desempleo, a los 144 desempleados que hay en Gibraltar, de un total de 32.000 habitantes.

«Podemos conseguir que el paro baje aún mas y que los 7.000 que cruzan la frontera sean aún mas, y que se cree más trabajo para toda la zona», ha aseverado Picardo, quien deja claro que pese a Brexit «existe la posibilidad de que todo siga igual e incluso sea mejor». «Estamos condenados a entendernos en este momento de la historia, tenemos la oportunidad para ello, pero siempre sin cruzar las líneas rojas de cada uno, sino agilizar lo que sabemos que podemos hacer y hacerlo aún mejor», ha aseverado.

Por ello, deja claro que «no solo es posible que todo siga igual sino que es posible dar un paso adelante y aquellos malentendidos y bloqueos hasta ahora puedan cambiar». Ha apuntado que «la mejor persona que puede ilustrar cómo de bien nos podía ir no sería yo, sino Margallo, que ha postulado exactamente todo lo que puede ocurrir en un futuro entre España y Gibraltar».

En ese sentido, deja claro que «hay grandes oportunidades, y la única diferencia entre Gibraltar y España es el precio a pagar», toda vez que «Margallo presenta toda esa oportunidad de riqueza y crear empleo, pero nos dice el precio a pagar es la cosoberanía de Gibraltar», tras lo que ha recordado el referéndum de 2002 donde el pueblo de Gibraltar «no acepta la cosoberanía», dejando claro que «si hace falta se pronunciará de nuevo sobre ese tema».

DIÁLOGO Y RESPETO PARA UNA FRONTERA «PERMEABLE»

Ante esta situación, Picardo, que lamenta que Margallo haya deshecho los acuerdos tripartitos de Córdoba, insiste en el diálogo para lograr una «frontera permeable» y considera que «ese dialogo puede ocurrir en el foro trilateral, en el que insisten Reino Unido y algunos partidos españoles».

A su juicio, «sólo por la vía del diálogo vamos a resolver un momento histórico como éste, pero sin pedir un precio que no estamos dispuestos a pagar, y así agilizar para conseguir un futuro mejor para todos».

«Ser una frontera externa de la UE no significa frontera inoperable ni cerrada, pues vemos como pasan marroquíes la frontera, e incluso vemos que esperan menos los que vienen de Marruecos para entrar en Europa que los que vienen de Gibraltar a España», ha apuntado Picardo, quien lamenta que el Gobierno central «le interesa entrar en diálogo con Gibraltar pero no conmigo, y dice que algunas personas de Gibraltar están dispuestos a negociar en secreto la cosoberanía, pero no creo que sea así, pues además Margallo no se quiere sentar con nosotros».

De esta forma, apunta que «si Margallo no se quiere sentar a hablar con nosotros sobre soberanía y nosotros no queremos hablar de soberanía, pues sentémonos y no hablemos de soberanía, sino de todo lo demás».

«Lo más fácil es el desencuentro, pues busquemos puntos de encuentro pues la relación podría ser magnífica y aún mejor; pero no es procedente ni útil intentar que todo pase por la soberanía». «No creo procedente que en el mundo del siglo XXI todo tenga que pasar por un trozo de seda», ha insistido.

Picardo por tanto pide «respeto» a la decisión de Gibraltar «y si se respeta, entonces podemos empezar a entendernos; si nos respetaran a lo mejor tendríamos nosotros otro punto de vista de lo que es el Gobierno de España, pues ahora para nosotros es la imagen de la imposición; y si hubiera respeto a lo mejor sabríamos entendernos mejor».

PAPEL DE LA JUNTA

Picardo ha valorado el papel de la Junta de Andalucía y considera «muy acertada» la declaración de la Junta, que pedía «menos soflama y más cooperación».

Por ello, valora la actitud de la Junta, así como de UGT y CCOO, que hacen llamamiento al diálogo y al consenso, y ha asegurado que no detecta que «haya consenso en torno a las palabras del ministro, sino más bien lo opuesto, todos piden que haya diálogo, apuesta por el empleo y por la lealtad institucional; hay consenso político y sindical alrededor de la proposición opuesta a la que presenta el ministro, y eso me alienta de que haya oportunidad de que ese consenso se estire al PP en el futuro».

En ese sentido aplaude el punto de vista de dirigentes del PP en Algeciras y La Línea que «son más acordes a las de UGT, CCOO, Junta, PSOE o Podemos, que a las del PP en Madrid, y eso debe hacerles pensar, y si sus miembros en la zona están hablando de consenso y diálogo y no hablan de soberanía y cosoberanía, debería ser un punto de partida para determinar donde debemos estar en el futuro».

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