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viernes, 29 marzo 2024
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Mayoral ensalza que Iglesias esté sacrificando su vida por Podemos y le atribuye la capacidad de integrar en el partido

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No cree que Anticapitalistas resten apoyos a Iglesias en Vistalegre y defiende crear una mayoría social con «la politización del dolor».

El secretario de Relaciones con la Sociedad Civil de Podemos, Rafael Mayoral, ha ensalzado que el líder de la formación morada, Pablo Iglesias, esté «sacrificando» una parte importante de su vida por el proyecto de Podemos y ha subrayado que su capacidad de «integrar» le convierte en la persona adecuada para conseguir que Podemos pase de ser «una maquinaria electoral» a «una fuerza popular» y poder así convertirse en un proyecto alternativo al PP de Mariano Rajoy.

En una entrevista con Europa Press, Mayoral ha puesto en valor que Iglesias haya sido capaz de integrar a diferentes sectores del partido en la misma dirección y, en este punto, ha recordado que fue él quien propuso que Pablo Echenique, que en la I Asamblea Ciudadana de Podemos presentó una lista alternativa, se hiciera cargo de la Secretaría de Organización, o quien planteó cambiar el sistema de votación para incorporar a las minorías a los órganos de dirección.

«Creo que no hay ningún dirigente de ninguna fuerza política que en estos momentos haya hecho eso –ha insistido–. Tiene esa capacidad de integración de amplios sectores, y creo que eso es algo que hay que reconocerle de cara a poder afrontar el futuro» del partido, que comenzará a gestarse en febrero en la II Asamblea Ciudadana Estatal, conocida como Vistalegre II.

A su juicio, Iglesias es un elemento fundamental de «visibilización» del proyecto alternativo a Mariano Rajoy y, por ello, ha censurado que las élites centren sus ataques a Podemos en la persona que hoy lo dirige por ser «un elemento de cohesión» del partido.

A IGLESIAS LE QUEDA «UNA TAREA IMPORTANTE POR CUMPLIR»

Según ha dicho, alguien que ha encabezado un proyecto político y que ha conseguido «romper» el sistema bipartidista ha demostrado «un alto grado de eficacia» y que le sitúa en estos momentos como la persona con más posibilidades para apartar a Mariano Rajoy.

De ahí que defienda que a Iglesias le queda «una tarea importante por cumplir». «A Pablo le ha tocado una tarea que es una putada porque está teniendo que sacrificar una parte importante de su vida para apostar por este proyecto. Lo hizo desde el minuto uno y creo que de momento sigue siendo necesario que cumpla esa tarea», ha abundado.

Mayoral ha rehusado referirse a los posibles errores que haya podido cometer Iglesias para que haya surgido cierta contestación interna en Podemos porque, ha asegurado, en el partido se ha ejercido la responsabilidad de forma «colectiva», y ha valorado que existan diferentes opiniones dentro del mismo proyecto político «plural» y que se expresen de forma «directa».

Por ello, ha rechazado «personalizar» el debate en Podemos en las dos principales facciones que llegarán a Vistalegre II: la ‘pablista’, encabezada por el actual líder, Pablo Iglesias, y la ‘errejonista’, capitaneada por el ‘número dos’ del partido, Íñigo Errejón. En su opinión, hacerlo «rebaja» el debate en un partido que es «más plural, diverso y complejo».

NO HAY DIFERENCIAS, SINO MATICES ENTRE IGLESIAS Y ERREJÓN

El diputado de Podemos admite que entre los modelos de partido que defienden Iglesias y Errejón no hay diferencias, sino sólo «matices» sobre cómo abordar los cambios para pasar de ser «una máquina electoral» a «una fuerza popular». «Ahí es donde están las claves y ahí es donde se establecen determinadas resistencias a los cambios», ha apostillado.

Según ha defendido, Podemos debe «profundizar» en unos mecanismos participativos que sean capaces de controlar los aparatos y los órganos de dirección. «Podemos es un partido que no es un partido y que no puede convertirse en un partido, sino que tiene que enraizarse como un movimiento», ha señalado.

Pero, además, el partido debe ser capaz de establecer una «sinergia» entre la labor institucional y el conflicto social. En su opinión, «la politización del dolor» puede aglutinar a una mayoría social si se convierte en el mecanismo de «la construcción de la esperanza» para que aquellos sectores que están sufriendo políticas públicas «regresivas» y «antidemocráticas» sean capaces de «rescatar» la democracia.

Mayoral asume que en determinados momentos sí se ha dado una imagen hacia el exterior de que había una mala relación personal entre Iglesias y Errejón pero ha puntualizado que ha sido un periodo «corto» de tiempo.

HAY ALGUNAS COINCIDENCIAS CON ANTICAPITALISTAS

El responsable de Relaciones con la Sociedad Civil ve con buenos ojos que el tercer sector de podemos, los Anticapitalistas, presente una lista a la dirección y proyectos distintos para Vistalegre II porque, a su juicio, eso «enriquece» el debate.

Y no cree que eso le vaya a restar apoyos a Iglesias, sino que va a «reforzar» la filosofía que ha defendido en el último año: «que se abran las estructuras para incorporar todas las sensibilidades de Podemos».

«La pluralidad no se incorpora para que te aplaudan, sino para tener todos los puntos de vista y, a partir de ahí, poder establecer un debate y poder llegar a acuerdos», ha apuntado Mayoral, incidiendo en que va a haber con los Anticapitalistas coincidencias importantes en la necesidad de «profundizar» el carácter popular de Podemos.

Aunque discrepa con el líder de esta corriente, Miguel Urbán, en que tanto Iglesias como Errejón han moderado su propuesta para Podemos, sí admite que ha habido una «adaptación» a las diferentes «contradicciones» con la que el partido se ha ido encontrando.

«Entre los que plantean que hay un proceso de moderación y los que plantean otro de radicalización lo que nos encontramos al final es que hay un proceso político abierto en nuestro país que ha roto el bipartidismo, que ha puesto en la agenda los problemas sociales y que abre la posibilidad de que las cosas empiecen a ser diferentes», ha expuesto.

Y es que, según ha querido dejar claro, Podemos no ha aparecido en el panorama político para «demoler» las instituciones, sino para «rescatarlas» después de que hayan sido puestas «al servicio de los privilegiados».

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