Cospedal pide una Alianza «equilibrada» y una presencia «más real» y «más operacional de la OTAN en el ámbito sur»
. La ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, ha confiado en que España seguirá manteniendo «excelentes relaciones» con la nueva Administración estadounidense de Donald Trump como hasta ahora y ha reiterado el compromiso del Gobierno de cumplir «progresivamente» la meta acordada de destinar el 2% del Producto Interior Bruto a defensa, una de las prioridades de Washington.
«Nosotros venimos en una posición de defender los intereses de defensa de España y también nuestros intereses tradicionales de mantener nuestra posición como socios y aliados de Estados Unidos», ha explicado Cospedal en declaraciones a la prensa a su llegada a su primera reunión con sus homólogos de la OTAN, en la que darán la bienvenida el nuevo jefe del Pentágono, James Mattis.
Cospedal ha recordado que Estados Unidos es «un país muy importante» para España. «Todo el mundo conoce las excelentes relaciones que hemos mantenido siempre y es nuestra voluntad seguir haciéndolo», ha puntualizado.
Al ser preguntada si España tiene intención de elevar su gasto en defensa en respuesta con la petición de la nueva Administración estadounidense a sus socios aliados, Cospedal ha asegurado que «España tiene asumió un compromiso» desde la cumbre de Gales de 2014 «de ir acercándose progresivamente al 2% del gasto en defensa nacional» cuando los líderes aliados se dieron un plazo de diez años para cumplir la meta.
«Es el compromiso del Gobierno de España. Tenemos la intención de cumplirlo e iremos hablando poco a poco de cómo se va perfeccionando», ha explicado sin dar más detalles.
«Para nosotros el gasto en defensa nacional tiene que ver también mucho con nuestra seguridad interior y es la defensa propia», ha defendido la ministra, que ha insistido en que se trata de «la seguridad de todas las familias españolas».
España será el tercer país de la OTAN que menos porcentaje de su Producto Interior Bruto (PIB) destinará a gasto en defensa en 2016, el 0,91% frente al objetivo pactado de destinar al menos el 2%, sólo por delante de Luxemburgo (0,44%) y Bélgica (0,85%), según estimaciones de la OTAN de julio, aunque no se harán públicos los datos definitivos hasta marzo. Sólo cinco países –Estados Unidos, Grecia, Reino Unido, Estonia y Polonia– cumplen ya la meta de destinar el 2% o más a defensa.
BILATERAL CON STOLTENBERG
Cospedal trasladará al secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, en su encuentro bilateral previo al arranque de la ministerial de dos días, el «compromiso» de España con mantener su participación «muy activa» en las misiones de la Alianza Atlántica, tanto en el sur como en el este pero también la importancia para España de garantizar una OTAN «equilibrada en todos los ámbitos y ejes geográficos» y de garantizar su mayor implicación para responder a las amenazas del flanco sur.
En este sentido, Cospedal ha evocado la misiva conjunta que ha remitido a Stoltenberg hace cuatro días con sus homólogos de Francia, Italia y Portugal para reclamar una presencia «más real» y «más operacional de la OTAN en el ámbito sur».
También ha incidido en la necesidad de que haya «una íntima colaboración y también aprovechamiento de la sinergias entre la OTAN y otras organizaciones internacionales» como la UE, la Liga Árabe y la Unión Africana a fin de contribuir al refuerzo de las capacidades de los países del sur «que necesitan un reforzamiento de sus instituciones» y aprovechar las capacidades militares de la OTAN, pero también para apoyar la reconstrucción, capacidades de asesoramiento, de acompañamiento y asistencia a estos países.
Se espera que los ministros de Defensa den luz verde este miércoles a la creación de un centro regional en el cuartel general de Nápoles para anticipar las amenazas desde el Norte de África y Oriente Próximo, especialmente la amenaza terrorista.
«Nos ayudará a coordinar información sobre países en crisis como Libia e Irak y nos ayudará a responder al terrorismo y otros desafíos que emanan de la región», ha explicado Stoltenberg a su llegada a la reunión, en la que también discutirán «qué más puede hacer la OTAN en la lucha contra el terrorismo», otras de las prioridades de la Administración de Trump.