Los efectos económicos de la expansión del coronavirus en España han centrado este lunes la reunión de la Ejecutiva Federal del PSOE, donde hay preocupación por la «psicosis» que se está generando en relación con la enfermedad y por el reducido margen de actuación para paliar los daños económicos en un país altamente endeudado como es España.
Así lo reconocen miembros de la cúpula del PSOE, donde se mira a Bruselas para que sea flexible y facilite que España pueda asumir gastos extraordinarios para intentar paliar los efectos del coronavirus en su economía sin incumplir sus compromisos europeos en materia de reducción del déficit.
En la rueda de prensa posterior a la reunión, la presidenta del PSOE, Cristina Narbona, ha apuntado que la Comisión Europea está estudiando medidas como consecuencia de la expansión del coronavirus «donde caben elementos de flexibilidad por parte de las instituciones comunitarias en relación con la situación económica de los distintos países».
De ahí que Narbona haya avanzando que el plan de choque anunciado este lunes por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, frente a los efectos económicos del coronavirus «tendrá mucho que ver con cómo encajan» las previsiones económicas de España «en lo que es el paraguas comunitario y las propias herramientas de la Comisión en apoyo de los distintos países».
En la reunión de la Ejecutiva, según testigos presenciales, se ha asumido que la reducción de los desplazamientos a nivel mundial tendrá un impacto en la economía española, donde el turismo representa en torno al 15 por ciento de su Producto Interior Bruto (PIB).
Lo que no se ha puesto en cuestión es la gestión de la crisis por parte del Ministerio de Sanidad. En la rueda de prensa, Narbona ha precisado que el PSOE había hecho un análisis de la situación «no desde un enfoque de alarmismo», sino con la «confianza» en la «capacidad de anticipación y gestión por parte de las autoridades españolas».
Sin querer aportar mayores detalles sobre el plan de choque en el que trabaja el Gobierno, ha aventurado que seguramente se tratará de medidas vinculadas a los «sectores más afectados por la reducción de la actividad económica y de las comunicaciones».
Y ha dado por hecho que el Gobierno buscará apoyos parlamentarios para poner en marcha eventuales medidas una vez que las haya identificado. En este sentido, ha dado la «bienvenida» a las propuestas que pueda hacer el PP en la materia.