El actor Javier Botet ha sido el protagonista absoluto la mañana de este domingo en el 52 Sitges Film Festival – Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya con su interpretación en la ópera prima de Óscar Martín, ‘Amigo’, que ahonda en la amistad, la culpa y la dependencia.
En la película, tras un grave accidente, David decide acoger y cuidar en su casa a su mejor amigo, Javi, pero las rencillas entre ambos no tardarán en aflorar poniendo en evidencia una relación envenenada y homicida.
Con la interpretación también de David Pareja y Patricia Estremera, ‘Amigo’ es una propuesta que viaja a una vieja España gótica, de la mano de un velado homenaje a las películas de Chicho Ibáñez Serrador, y ahonda en los resortes de la culpa, la amistad y la dependencia con un atractivo resultado.
ANGUSTIA E IMPOTENCIA
Con papeles en cintas como ‘It’, ‘La momia’, ‘Expediente Warren’, ‘Alien: Covenant’ y ‘Juego de Tronos’, Botet ha aportado una interpretación capaz de transmitir la angustia, ansiedad e impotencia de su personaje, encerrando al espectador en una pesadilla claustrofóbica.
De la mano de la dirección fotográfica de Alberto Morago, la atmósfera de la película oscura y fría, desarrollándose en el interior de una vieja casa en medio del campo repleta de retorcidos cabezales, colchas de satén y gotelé.
El aplauso, breve pero eficaz, ha ido acompañado de comentarios hacia la «descomunal» actuación de los protagonistas, envueltos en esta asfixiante pesadilla que algunos fans han considerado que, de momento, está por encima de la media de Sitges.
Con esta película, el director ha dado el salto al largometraje tras la dirección de ‘Bulimía’ y ‘Bonsái’, rodada con su productora El Ojo Mecánico cofundada con Elena Muñoz.